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SEVILLA 0-DEPORTIVO 0

El Dépor toca madera en Sevilla

El equipo blanquiazul, que fue de más a menos, solo tuvo dos llegadas claras en todo el partido

El Sevilla, superior en el segundo tiempo, desperdició numerosas ocasiones y envió dos balones al larguero

Autor: Rubén Ventureira

Eduardo Abad / Efe

El Dépor tocó madera en Sevilla. El equipo de Álvarez envió dos balones al larguero, un puñado de claras ocasiones a la papelera y otro ramillete a las manos de Manu, muy inspirado. El de Lotina, bien en el primer tiempo, fue superado claramente en el segundo.

El técnico deportivista dio dos vueltas al once. Llevaba un par de semanas defendiendo al doble pivote Tomás-Rodríguez, pero a la hora de la verdad lo cambió: entró Rubén Pérez, que no había debutado con el Dépor, por el malagueño. Míchel pasó de la titularidad a la grada, pues fue el descartado; su lugar lo ocupó Desmarets, que a su vez había quedado fuera de la lista contra el Zaragoza. En fin, volantazos propios de principio de temporada los que da el vizcaíno. El esquema sí lo mantuvo: 4-2-3-1. El Sevilla opuso un 4-4-2, con Perotti y Navas por bandas, y con Negredo y Kanouté en punta de ataque. El público del Pizjuán recibió con palmas a su equipo, dando por zanjado el braguetazo de la Champions.

Se esperaba una avalancha inicial hispalense, pero no la hubo porque el Dépor no la permitió. Se plantaron muy bien los de Lotina, que asustaron de inicio. En el minuto 4 el equipo coruñés demostró que tiene fútbol: una jugada espectacular que inició Urreta en la banda derecha, y en la que intervinieron Guardado y Desmarets, acabó con un remate de Adrián al cuerpo de Palop tras un centro magnífico trazado por Morel.

El Sevilla se lo tomó como un aviso a navegantes del Nervión y por eso no se volcó de inicio. Le costó arrancar. El Dépor le tapó las bandas, donde la proporción siempre era de 2 a 1 a favor de los coruñeses. En el capítulo de ayudas se destacó Tomás. En la primera media hora, los de Lotina apenas dejaron huecos en su red. Si acaso a los 17 minutos, cuando Navarro encontró una autopista en la banda izquierda y sirvió a Perotti, que envió un punterazo fácil para Manu. El Dépor se acurrucó en su campo, con la idea de apostar por el 2 a la contra. Se estiró poco, y siempre por la izquierda, donde Morel obligó a trabajar a Navas en defensa.

El Sevilla fue entrando en calor, y se puso a temperatura ambiente (29 grados) a la media hora. Perotti, hasta entonces bien sujeto por Manuel Pablo, disparó el mercurio. Primero colgó un balón que Negredo estrelló en el larguero (min 32) y después ideó otra rosca que acabó con un disparo de Navas al lateral de la red (min 34). Con un punto de agresividad que desquició a la afición local, el Dépor volvió a domar al rival y dejó morir el primer tiempo.

El segundo tiempo arrancó sin cambios y con un Sevilla picado. Manu se sacó de encima un cabezazo de Cáceres a la salida de un córner (min 47). Después, Perotti se encontró un balón en el área que resolvió con una semivaselina que se marchó fuera (min 53). Al Sevilla le seguía faltando profundidad y Kanouté, muy desenfocado. Lotina modificó el guión al colocar a Desmarets por Lassad (min 57). Un minuto después, Lopo, solo, falló en el área pequeña la ocasión del partido: su cabezazo se fue alto. El Sevilla llegaba en acciones individuales. Negredo, por tres veces (min 65, 66 y 68), opositó al gol, pero se encontró con Manu, siempre bien colocado.

Álvarez quiso dar un giro con un doble cambio (min 67): entraron Renato y José Carlos por Kanouté y Guarente. Los locales se lanzaron con todo a por el gol, que pudo llegar si Konko (min 72) no se llega a topar con el larguero. Lotina dio oxígeno al doble pivote, y entraron Rodríguez y Juca por Tomás y Pérez. Se trataba de amarrar el empate. El Dépor acabó encerrado, pero sacó un puntazo.