El Celta de Vigo inicia su particular 'Tourmalet'

El duelo ante el equipo rojiblanco le sumerge en una nueva etapa por la que se tendrá que medir a poderosos como Betis y Valladolid

No hace falta descubrir ahora la historia de un de los equipos importantes del fútbol nacional. Sólo con decir que, desde que fue fundado en 1923, ha militado 46 campañas en Primera División, que ha jugado incluso la Champions League -en el la campaña 2003/04, en la que llegó a octavos de final-, se puede entender que, para este equipo, militar en la Liga Adelante debe ser algo temporal, es decir, que cada año aspira a volver a la elite del fútbol nacional.
Pero los últimos años ha vivido una situación complicada, al no ejercer su papel de equipo 'grande' en la categoría de plata. Sin embrago, las nueve jornadas disputadas hasta ahora evidencian que este año se han puesto serios y quieren estar arriba desde el principio.
La base es la misma que la temporada pasada, pero han llegado una serie de piezas que han dotado a la plantilla celeste de un mayor potencial arriba, la principal carencia del ejercicio anterior. Si el curso pasado fue uno de los conjuntos menos goleadores de la categoría, este año ya llevan 17 tantos anotados.
Así, jugadores como el trotamundos Quique de Lucas han llegado a la disciplina celeste para aportar más gol al equipo celtiña. Hasta ahora, ha anotado tres tantos y ha dado cuatro asistencias. Sin embrago, una fuerte golpe en el sóleo izquierdo hace que sea duda para el partido de hoy. Otro hombre que ha llegado este año a la disciplina viguesa es Joán Tomás, procedente del Villarreal, que está firmando buenas actuaciones en el centro del campo celtiña.
Además de los fichajes, un total de cuatro, el nuevo entrenador, Paco Herrera, está dando un mayor protagonismo a la cantera. Jugadores como el centrocampista Álex o el mediocentro Jonathan Vila, que Herrera a reconvertido a central, están siendo hombres importantes esta temporada.
El Celta juega al contragolpe, con una fuerte presión arriba. Suele alinear a tres hombres en punta, aunque con mucha movilidad, lo que complica mucho la labor de las zagas rivales. A todo esto, se une un manejo del balón bastante rápido. Esto ha permitido que, en ocho jornadas que llevamos de Liga, el delantero David Rodríguez, cedido un año más por el Almería, lleve ya seis goles.
Ilusión
La última vez que ambos equipos se vieron las caras en Balaídos fue en la octava jornada de la temporada 84/85. En aquella ocasión, el conjunto vigués consiguió una holgada victoria por cuatro a uno ante un Granada bastante blando. El resultado reflejó el nivel de ambos conjuntos, el equipo gallego terminó en tercera posición, consiguiendo el ascenso a Primera, mientras que el conjunto rojiblanco, antepenúltimo en la tabla, descendió a Segunda B.
Desde entonces, la situación de ambos ha sido bastante distinta. Los celtiñas tuvieron una época dorada en los años noventa y las primeras campañas del siglo XXI, en las cuales participaron varias veces en competiciones europeas -incluida la Copa de Europa- y jugaron una final de Copa del Rey, que perdieron ante el Zaragoza.
Por su parte, el conjunto granadino, tras unos años de ascensos y descensos en Segunda, acabó hundiéndose en la categoría de bronce durante muchos años -incluido un descenso administrativo-.
Mientras que unos viven la euforia de su vuelta al fútbol profesional, y sueñan con volver al máximo nivel, los otros arrastran unos años de desilusión, en los que no han conseguido hacer creer a su afición que la vuela a Primera estaba cerca.
El arranque de los celestes ha devuelto a su hinchada la imagen de un equipo con aspiraciones, que va a estar, presumiblemente, en los puestos altos de la clasificación. Esto es muy largo, pero las sensaciones hasta ahora son de un equipo con ambición y con jugadores para pelear por el ascenso.
Pero también es cierto que, hasta ahora, no se han enfrentado a los equipos más en forma del campeonato. El partido con el Granada dará inicio a una serie enfrentamientos con los mejores -Betis y Valladolid, entre otros-. Será entonces cuando se podrá calibrar su verdadero potencial.

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